viernes, 25 de diciembre de 2009

Si Papa Noel existiera...

Yo quisiera que fuera como el que sigue y que en lugar de regalos me trajera análisis tan certeros sobre este mundo inhumano en el que vivimos (paradójicamente, hecho por humanos).
¡¡Viva Karl Marx y su legado!! Su legado vivo, eso sí, como a él le gustaría. No llenándose de polvo en alguna estantería.
Un brindis por el solsticio de invierno y por que nazcan más Karls Marxs en lugar de "niños jesuses", con todos mis respetos para los cristianos de base que también quieren cambiar el mundo.



jueves, 24 de diciembre de 2009

Cacerolada popular contra el rey de España

Hoy, mientras Juancar esté realizando su tradicional y soporífero discurso previo a la cena de Nochebuena, un grupo de ciudadanos y ciudadanas españoles se estará manifestando contra él haciendo sonar las cacerolas todo lo fuerte que se pueda para no tener que oir el vacuo y monótono discurso de cada año.
Ya son demasiados años de discursito y, por mucho que este año nos digan que se va a "modernizar", lo cierto es que parece que, como indica Isaac Rosa en su columna de Público hoy, de lo que se trata es de hacernos caer en la trampa. Es decir, anuncian que el discurso del rey este año será distinto para que la gente lo sintonice aunque sea por curiosidad, cosa que cada año va siendo más complicado para ellos. Casi nadie ve el discurso del rey y, si lo ven, otra cosa es que lo escuchen. A veces ni lo oyen por el ruido familiar.
Ojalá la iniciativa tenga suerte y se demuestre que el rechazo a la monarquía no es sólo un silencio que se extiende sino un clamor imparable...


¡¡Salud y República!!

jueves, 17 de diciembre de 2009

Discurso de Hugo Chávez en Dinamarca

Discurso del Comandante en Jefe, Hugo Rafael Chávez Frías, presidente de la República Bolivariana de Venezuela, en el marco de la reunión de la farsa de gobierno mundial que tenemos, la ONU, sobre Cambio Climático. Esto es ecologismo y lo demás son tonterías... Por cierto, fue el discurso más aplaudido. Chávez fue interrumpido en doce ocasiones por las ovaciones de los asistentes. Muy elocuente. Para que luego lo presenten los medios como un "loco". Pues será que los "locos" dicen más verdades que todos los "cuerdos" juntos.
XV Conferencia Internacional de la Organización de Naciones Unidas sobre Cambio Climático
Copenhague, Reino de Dinamarca
Miércoles, 16 de diciembre de 2009

Discurso del Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez

Señor Presidente, señores, señoras, excelencias, amigas y amigos, les prometo que no voy a hablar más del que más ha hablado esta tarde aquí, permítanme un comentario inicial que hubiera querido hacer como parte del punto previo que fue ejercido por la delegación de Brasil, de China, de India, Bolivia, nosotros estábamos allá pidiendo la palabra pero, no fue posible tomarla. Dijo la representante Bolivia, mi saludo por cierto al compañero Presidente Evo Morales quien está por allí, Presidente de la República de Bolivia.

Asistentes [Aplausos].

Ella dijo entre otras cosas lo siguiente, tomé nota por aquí, dijo: el texto presentado no es democrático, no es inclusivo.

Yo venía llegando apenas y nos estábamos sentando cuando oímos a la Presidenta de la sesión anterior, la Ministra, decir que venía un documento por ahí, pero que nadie conoce, yo he preguntado por el documento, aún no lo tenemos, creo que nadie sabe de ese documento top secret.

Ahora ciertamente, la camarada boliviana lo dijo, no es democrático, no es inclusivo, ahora señoras, señores: ¿Acaso no es esa precisamente la realidad de este mundo? ¿Acaso estamos en un mundo democrático? ¿Acaso el sistema mundial es inclusivo? ¿Podemos esperar algo democrático, inclusivo del sistema mundial actual? Lo que vivimos en este planeta es una dictadura imperial, y desde aquí la seguimos denunciando ¡Abajo la dictadura imperial! ¡Y que vivan los pueblos y la democracia y la igualdad en este planeta!

Asistentes [Aplausos].

Y esto que aquí vemos es reflejo de ello: exclusión.

Hay un grupo de países que se creen superiores a nosotros los del sur, a nosotros el tercer mundo, a nosotros los subdesarrollados, o como dice el gran amigo Eduardo Galeano: nosotros lo países arrollados como por un tren que nos arrolló en la historia. Así que no nos extrañemos pues de esto, no nos extrañemos, no hay democracia en el mundo y aquí estamos una vez más ante una poderosa evidencia de la dictadura imperial mundial. Luego aquí subieron dos jóvenes, afortunadamente los agentes del orden han sido decentes, algún empujón por ahí, y ellos colaboraron ¿no? Allá afuera hay mucha gente ¿saben? Claro, no caben en este salón, mucha gente; he leído por prensa que hubo algunos detenidos, algunas protestas intensas, ahí en las calles de Copenhague, y quiero saludar a toda esa gente que esta allá afuera, la mayor parte de ella jóvenes.

Asistentes [Aplausos].

Claro son jóvenes preocupados, creo que con razón mucho más que nosotros por el futuro del mundo; nosotros tenemos -la mayoría de los que estamos aquí- ya el sol a la espalda, ellos tienen el sol al frente y están muy preocupados.

Uno pudiera decir señor Presidente que un fantasma recorre Copenhague, parafraseando a Carlos Marx, el gran Carlos Marx, un fantasma recorre las calles de Copenhague, y creo que ese fantasma anda en silencio por esta sala, por ahí anda, entre nosotros, se mete por los pasillos, sale por debajo, sube, ese fantasma es un fantasma espantoso casi nadie quiere nombrarlo: el capitalismo es el fantasma, casi nadie quiere nombrarlo.

Asistentes [Aplausos].

Es el capitalismo, ahí rugen los pueblos, allá afuera se oyen.

Yo venía leyendo algunas consignas que hay en las calles pintadas, y yo creo que esas consignas de estos jóvenes, algunas de ellas la oí cuando iba el joven allá y la joven, hay dos de las que tomé nota. Se oyen entre otras dos poderosas consignas. Una: No cambien el clima, cambien el sistema.

Asistentes [aplausos].

Y yo la tomo para nosotros.
No cambiemos el clima ¡Cambiemos el sistema!
Y en consecuencia comenzaremos a salvar el planeta. El capitalismo, el modelo de desarrollo destructivo está acabando con la vida, amenaza con acabar definitivamente con la especie humana.

Y el otro lema llama a la reflexión. Muy a tono con la crisis bancaria que recorrió al mundo y todavía lo golpea, y la forma cómo los países del norte rico auxiliaron a los banqueros y a los grandes bancos, sólo Estados Unidos, bueno, se perdió la cifra, es astronómica; para salvar bancos. Dicen en las calles lo siguiente: Si el clima fuera un banco ya lo habrían salvado.

Asistentes [aplausos].

Y creo que es verdad. Si el clima fuera un banco capitalista de los más grandes, ya lo habrían salvado los gobiernos ricos.
Creo que Obama no ha llegado, recibió el Premio Nóbel de la Paz casi el mismo día que mandaba 30 mil soldados más a matar inocentes en Afganistán, y viene ahora a presentarse aquí con el Premio Nóbel de la Paz, el Presidente de los Estados Unidos.

Pero Estados Unidos tiene la maquinita de hacer billetes, de hacer dólares, y ha salvado, bueno creen haber salvado los bancos y el sistema capitalista.

Bien, esto, comentario al margen, que yo quería hacerlo allá, estábamos levantando la mano para acompañar a Brasil, a India, a Bolivia, a China, en su interesante posición que Venezuela comparte y los países de la Alianza Bolivariana, con firmeza; pero bueno, no nos dieron la palabra, así que no me cuente estos minutos por favor Presidente.

Asistentes [aplausos].

Fíjense, por ahí conocí, tuve el gusto de conocer a este escritor francés Hervé Kempf, recomiendo este libro, lo recomiendo, se consigue en español –por ahí está Hervé- también en francés, en inglés seguramente, Cómo los ricos destruyen el planeta. Hervé Kempf: Cómo los ricos destruyen el planeta. Por eso fue que Cristo lo dijo: Más fácil será que un camello entre por el ojo de una aguja, a que un rico entre al Reino de los cielos. Eso lo dijo Cristo nuestro señor.

Asistentes [aplausos].

Los ricos están destruyendo el planeta.
¿Será que piensan irse para otro cuando destruyan este?
¿Tendrán planes para irse a otro planeta?
Hasta ahora no se ve ninguno en el horizonte de la galaxia.

Apenas este libro me ha llegado, me lo ha regalado Ignacio Ramonet que está por ahí también en esta sala; y terminando el prólogo o el preámbulo esta frase es muy importante, dice Kempf lo siguiente, leo: “No podremos reducir el consumo material a nivel global si no hacemos que los poderosos bajen varios escalones, y si no combatimos la desigualdad. Es necesario que al principio ecologista tan útil a la hora de tomar conciencia, pensar globalmente y actuar localmente, le sumemos el principio que impone la situación: consumir menos y repartir mejor”. Creo que es un buen consejo que nos da este escritor francés Hervé Kempf.

Asistentes [aplausos].

Ahora bien señor Presidente, el cambio climático es sin duda el problema ambiental más devastador del presente siglo, inundaciones, sequías, tormentas severas, huracanes, deshielos, ascenso del nivel medio del mar, acidificación de los océanos y olas de calor, todo eso agudiza el impacto de las crisis globales que nos azotan.

La actual actividad humana supera los umbrales de la sostenibilidad, poniendo en peligro la vida en el planeta, pero también en ello somos profundamente desiguales.

Quiero recodarlo: los 500 millones de personas más ricas, 500 millones, esto es el siete por ciento, siete por ciento, seven por ciento de la población mundial. Ese siete por ciento es responsable, esos quinientos millones de personas más ricas son responsables del cincuenta por ciento de las emisiones contaminantes, mientras que el 50 por ciento más pobre es responsable de sólo siete por ciento de las emisiones contaminantes. Por eso a mí me llama la atención, es un poco extraño, llamar aquí a Estados Unidos y a China al mismo nivel. Estados Unidos tiene apenas, bueno, que, llegará si acaso a 300 millones de habitantes.

China tiene casi 5 veces más población que Estados Unidos.

Estados Unidos consume más de 20 millones de barriles diarios de petróleo, China llega apenas a 5, 6 millones de barriles diarios, no se puede pedir lo mismo a Estados Unidos y a China.

He allí temas que hay que discutir, ojalá pudiéramos los Jefes de Estado y de Gobierno sentarnos a discutir de verdad, verdad sobre estos temas.

Luego señor Presidente, el 60 por ciento de los ecosistemas del planeta están dañados, el 20 por ciento de la corteza terrestre está degradada; hemos sido testigos impasibles de la deforestación, la conversión de tierras, la desertificación, las alteraciones de los sistemas de agua dulce, la sobreexplotación de los recursos marinos, la contaminación y la pérdida de la diversidad biológica.

La utilización exacerbada de la tierra sobrepasa en un 30 por ciento la capacidad para regenerarla. El planeta está perdiendo lo que llaman los técnicos la capacidad para autorregularse, eso lo está perdiendo el Planeta, cada día se liberan más desechos de los que pueden ser procesados. La supervivencia de nuestra especie martilla en la conciencia de la humanidad. A pesar de la urgencia, han transcurrido dos años de negociaciones para concluir un segundo período de compromiso bajo el Protocolo de Kyoto, y asistimos a esta cita sin un acuerdo real y significativo.

Y por cierto, acerca del texto que viene de la nada, como algunos lo calificaron, el representante chino, Venezuela dice, y los países del ALBA decimos, la Alianza Bolivariana que nosotros no aceptamos, desde ya lo decimos, ningún otro texto que no sea el que venga de los grupos de trabajo del Protocolo de Kyoto y de la Convención, son los textos legítimos que se han estado discutiendo con tanta intensidad en estos años.

Asistentes [aplausos].

Y en estas últimas horas, creo que ustedes no han dormido, además de que no han almorzado, no han dormido. No me parece lógico que salga ahora un documento de la nada, como dicen ustedes.
El objetivo científicamente sustentado de reducir la emisión de gases contaminantes y lograr un convenio de cooperación a largo plazo a todas luces, hoy a esta hora, parece haber fracasado, por ahora.

La razón ¿Cuál es? No tenemos duda. La razón es la actitud irresponsable y la falta de voluntad política de las naciones más poderosas del planeta, nadie se sienta ofendido, recurro al gran José Gervasio Artigas cuando dijo: “Con la verdad ni ofendo ni temo”. Pero en verdad es una actitud irresponsable de marchas, de contramarchas, de exclusión, de un manejo elitesco, de un problema que es de todos y que sólo podremos resolver todos.

El conservadurismo político y el egoísmo de los grandes consumidores, de los países más ricos denotan una alta insensibilidad y falta de solidaridad con los más pobres, con los hambrientos, con los más vulnerables a las enfermedades, a los desastres naturales, señor Presidente, es imprescindible un nuevo y único acuerdo aplicable a partes absolutamente desiguales, por la magnitud de sus contribuciones y capacidades económicas, financieras y tecnológicas y que esté basado en el respeto irrestricto a los principios contenidos en la Convención.

Los países desarrollados deberían establecer compromisos vinculantes, claros y concretos en la disminución sustancial de sus emisiones y asumir obligaciones de asistencia financiera y tecnológica a los países pobres para hacer frente a los peligros destructivos del cambio climático. En tal sentido la singularidad de los estados insulares y de los países menos desarrollados, debería ser plenamente reconocida.

Señor Presidente el cambio climático no es el único problema que afecta hoy a la humanidad, otros flagelos e injusticias nos asechan, la brecha que separa los países ricos y pobres no ha dejado de crecer, a pesar de todos los objetivos del milenio, la cumbre de financiamiento de Monterrey, todas esas cumbres como decía aquí el Presidente de Senegal denunciando una gran verdad, promesas y promesas incumplidas y el mundo sigue su marcha destructiva.

El ingreso total de los 500 individuos más ricos del mundo es superior al ingreso de los 416 millones de personas más pobres, los 2 mil 800 millones de personas que viven en la pobreza, con menos de 2 dólares al día y que representan el 40 por ciento de la población global obtiene sólo el 5 por ciento del ingreso mundial.

Hoy mueren al año unos 9,2 millones de niños antes de alcanzar el quinto año de vida y el 99,9 por ciento de estas muertes ocurren en los países más pobres.

La mortalidad infantil es de 47 muertes por mil nacidos vivos, pero es de sólo 5 por cada mil en los países ricos. La esperanza de vida en el planeta es de 67 años, en los países ricos es de 79, mientras en algunas naciones pobres es de sólo 40 años.

Adicionalmente existen mil cien millones de habitantes sin acceso al agua potable, 2 mil 600 millones sin servicio de saneamiento, más de 800 millones de analfabetos y mil veinte millones de personas hambrientas, ese es el escenario del mundo.

Ahora la causa ¿cuál es la causa?

Hablemos de la causa, no evadamos responsabilidades, no evadamos la profundidad de este problema, la causa sin duda, vuelvo al tema de todo este desastroso panorama es el sistema metabólico destructivo del capital y su modelo encarnado: el capitalismo.

Aquí hay una cita que quiero leerles brevemente de ese gran teólogo de la liberación Leonardo Boff, como sabemos brasileño, nuestro americano. Leonardo Boff dice sobre este tema lo siguiente:

¿Cuál es la causa? Ah, la causa es el sueño de buscar la felicidad a través de la acumulación material y del progreso sin fin, usando para eso la ciencia y la técnica con las cuales se puede explotar de forma ilimitada todos los recursos de la tierra; y cita por aquí a Charles Darwin y su “Selección natural” la sobrevivencia de los más fuertes, pero sabemos que los más fuertes sobreviven sobre la ceniza de los más débiles.

Juan Jacobo Rousseau siempre hay que recordarlo decía aquello: entre el fuerte y el débil la libertad oprime. Por eso es que el imperio habla de libertad, es la libertad para oprimir, para invadir, para asesinar, para aniquilar, para explotar, esa es su libertad y Rousseau agrega la frase salvadora: sólo la ley libera.

Hay algunos países que están jugando a que aquí no haya documento, porque precisamente no quieren una ley, no quieren una norma, porque la inexistencia de esa norma les permite jugar su libertad explotadora, su libertad arrolladora.

Hagamos un esfuerzo y presionemos aquí y en las calles para que aquí salga un compromiso, salga un documento que comprometa a los países más poderosos de la tierra.

Asistentes [Aplausos]

Bueno se pregunta Presidente Leonardo Boff ¿Usted le ha conocido a Boff? No sé si pudo venir Leonardo, yo le conocí hace poco en Paraguay, siempre lo hemos leído.

¿Puede una tierra finita soportar un proyecto infinito? La tesis del capitalismo, el desarrollismo infinito es un modelo destructivo, aceptémoslo.

Luego nos pregunta Boff: ¿qué podríamos esperar de Copenhague? Apenas esta sencilla confesión: así como estamos no podemos continuar, y un propósito simple, vamos a cambiar de rumbo, hagámoslo, pero sin cinismo, sin mentira, sin dobles agendas, sin documentos salidos de la nada, con la verdad por delante.

Hasta cuándo nos preguntamos desde Venezuela señor Presidente, señoras, señores, hasta cuándo vamos a permitir tales injusticias y desigualdades; hasta cuándo vamos a tolerar el actual orden económico internacional y los mecanismos de mercado vigente; hasta cuándo vamos a permitir que grandes epidemias como el VIH SIDA arrasen con poblaciones enteras; hasta cuándo vamos a permitir que los hambrientos no puedan alimentarse, ni alimentar a sus propios hijos; hasta cuándo vamos a permitir que sigan muriendo millones de niños por enfermedades curables; hasta cuándo vamos a permitir conflictos armados que masacran a millones de seres humanos inocentes, con el fin de apropiarse los poderosos de los recursos de otros pueblos.

Cesen las agresiones y las guerras pedimos los pueblos del mundo a los imperios, a los que pretenden seguir dominando el mundo y explotándonos.

No más bases militares imperiales, ni golpes de Estado, construyamos un orden económico y social más justo y equitativo, erradiquemos la pobreza, detengamos de inmediato los altos niveles de emisión, frenemos el deterioro ambiental y evitemos la gran catástrofe del cambio climático, integrémonos en el noble objetivo de ser todos más libres y solidarios.

Señor Presidente, hace casi dos siglos un venezolano universal, libertador de naciones y precursor de conciencias dejó para la posteridad un apotegma pleno de voluntad: “Si la naturaleza se opone lucharemos contra ella y haremos que nos obedezca...” Era Simón Bolívar el Libertador.

Desde la Venezuela Bolivariana, donde un día como hoy por cierto hace diez años, diez años exactos vivimos la tragedia climática más grande de nuestra historia: la tragedia de Vargas así llamada, desde esa Venezuela cuya Revolución intenta conquistar la justicia para todo su pueblo.
Sólo posible por el camino del socialismo, el socialismo, el otro fantasma del que hablaba Carlos Marx, ese anda por ahí también, más bien es como un contra fantasma, el socialismo, ese es el rumbo, ese es el rumbo para la salvación del planeta, no tengo yo la menor duda, y el capitalismo es el camino del infierno, a la destrucción del mundo. El socialismo, desde esa Venezuela que enfrenta por ello las amenazas del imperio norteamericano.

Desde los países que conformamos el ALBA, la Alianza Bolivariana exhortamos, yo quiero con respeto, pero desde mi alma exhortar a nombre de muchos en este planeta, exhortamos a los gobiernos y a los pueblos de la Tierra, parafraseando a Simón Bolívar, El Libertador; si la naturaleza destructiva del capitalismo se opone, pues luchemos contra ella y hagamos que nos obedezca, no esperemos de brazos cruzados la muerte de la humanidad.

La historia nos llama a la unión y a la lucha.

Si el capitalismo se resiste, nosotros estamos obligados a dar la batalla contra el capitalismo y abrir los caminos de la salvación de la especie humana, nos toca a nosotros, levantando las banderas de Cristo, de Mahoma, de la igualdad, del amor, de la justicia, del humanismo, del verdadero y más profundo humanismo. Si no lo hiciéramos, la más maravillosa creación del universo: el ser humano, desaparecerá, desaparecerá.

Este planeta tiene miles de millones de años, y vivió este planeta miles de millones de años sin nosotros la especie humana, es decir, no le hacemos falta nosotros para que él exista. Ahora, nosotros sin la Tierra no vivimos, y estamos destrozando la Pachamama, como dice Evo, como dicen nuestros hermanos aborígenes de Suramérica.

Finalmente señor Presidente ya para terminar, oigamos a Fidel Castro cuando dijo: Una especie está en peligro de extensión, el hombre.

Oigamos a Rosa Luxemburgo cuando dijo: Socialismo o barbarie.

Oigamos a Cristo el redentor cuando dijo: Bienaventurados los pobres porque de ellos será el reino de los cielos.

Señor Presidente, señoras y señores seamos capaces de hacer de esta Tierra no la tumba de la humanidad, hagamos de esta Tierra un cielo, un cielo de vida, de paz, y de paz de hermandad para toda la humanidad, para la especie humana.

Señor Presidente, señoras y señores muchísimas gracias y buen provecho.

Asistentes [aplausos]
Y, para los perezosos, va el discurso en versión video.

sábado, 5 de diciembre de 2009

La Iglesia española y el franquismo

Que la Iglesia española, prácticamente en su conjunto, sigue defendiendo las ideas del franquismo y al régimen mismo, es "vox populi". Pero asombra ver todavía, en pleno siglo XXI, que sigan dando la batalla de manera tan fehaciente por una dictadura sanguinaria que, por hablar en sus términos, pecó reiteradamente contra el mandamiento de "no matarás" (no me hagan decir cuál es ese mandamiento, si el primero, segundo o quinto, pues, por suerte, no tuve formación católica y desconozco estos detalles). Claro que tal vez los mandamientos venían con asterisco y letra pequeña para puntualizar que ese "no matarás" se refería solamente a los de tu clase, credo y condición. A los demás, ya sabemos, sangre y fuego o espada más cruz. Que se lo digan si no a todos los pueblos indígenas del continente americano...
Dejo estas imágenes que dan fe -nunca mejor dicho- del papel que sigue jugando la Iglesia Católica Española a día de hoy. Tienen pocos días, menos de un mes. Reflejan una misa celebrada en honor a Franco y demás fascistas "caídos por España". Véase cómo el honor patrio (besos a la bandera pre-constitucional fascista del aguilucho mientra suena el himno de España) está por encima de la comunión cristiana. Perdón, sé poco de estos temas, insisto, pero ¿la Iglesia no era en teoría una comunidad de cristianos que se identificaban por su condición de cristianos y no por su nacionalidad? ¿La institución eclesiástica no se creó con la finalidad de ayudar al desvalido? ¿Dónde queda esa visión cristiana de preocuparse por los más débiles cuando se baila el agua de los poderosos y, además, asesinos en su afán por perpetuar su poder?
Por si quedaran dudas de en qué posición ideológica se encuentra la Iglesia en general destaco las declaraciones del pro-nazi Papa Benedicto XVI recogidas hoy en la prensa: "El Papa califica de 'inmoral e inhumano' el comunismo". ¿A alguien le sorprende? A mí no, desde luego. Si no nos queman en la hoguera es porque no pueden, porque si no...
Para rematar los despropósitos de estos sectarios, ultra-fanáticos e intransigentes, dejo un artículo publicado el otro día en Rebelión que da cuenta del papel de la Iglesia en la desaparición de niños de rojos bajo el franquismo y en la represión a las presas republicanas en las cárceles. Reproducción, a su vez, de lo ya publicado en "El Plural". Ahí les va:

Transcurrido ya un año desde que Baltasar Garzón recogiese en su auto el denominado caso de los niños perdidos del franquismo -más de tres ya desde que la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa lo denunciase en 2006 dentro de su "Balance de Crímenes" de la dictadura- y tras el reciente acto público del miércoles de connotaciones negacionistas en torno a los trabajos forzados y las inhumanas condiciones de vida de los presos políticos en el Valle de los Caídos llevado a cabo en la Facultad de Económicas de la Universidad San Pablo CEU, cada vez queda más de manifiesto lo necesario de seguir dando a conocer, con todo detalle, el estremecedor alcance de la represión franquista en presidios, campos de trabajo y todo tipo de centros penitenciarios... así como la concreta relación que pudo tener la Iglesia Católica de España con todo ese "turismo penal alternativo". Particularmente en cuanto a todo lo sucedido en los centros penitenciarios de detención de mujeres y jóvenes.

La Iglesia católica proveyó el personal de "numerosos establecimientos penitenciarios".
O tal y como se recoge en el punto 77 de dicho Balance de crímenes denunciado por el Consejo de Europa: “La Iglesia Católica de España, estrechamente unida al régimen, participó en la persecución de los vencidos (…).También jugó un papel muy importante al proveer el personal de numerosos establecimientos penitenciarios, siendo los más tristemente célebres las prisiones de mujeres y los reformatorios para jóvenes cuyos antiguos detenidos han denunciado públicamente los malos tratos físicos y psicológicos que sufrieron por parte del personal religioso”.
¿Con qué cargos penales?

Ahora bien, situación de detención de tales mujeres y sus pequeños en tales "establecimientos penitenciarios" provistos con personal religioso, según dicha denuncia... ¿con qué cargos?Porque de no existir tales cargos, o de resultar manifiestamente infundados -ser familia de algún defensor de la República española, haber intentado huir del país...- nos encontraríamos ante una situación de colaboración en un número indeterminado de detenciones ilegales.
¿Qué funciones penitenciarias son esas de una confesión religiosa?

Ejercicio de anómalas funciones penitenciarias por parte de dicho mismo personal –incluso llegando a utilizar conventos y otros edificios de la Iglesia como centros de detención, como han señalado otros estudios–... ¿en virtud de qué?, cuándo la única participación reconocible al personal religioso de cualquier confesión en centros penitenciarios lo es a los efectos de dar asistencia religiosa, en caso de ser solicitada por parte de los detenidos.
¿En qué condiciones de detención se tuvo a esas madres y sus pequeños?

¿Y en qué condiciones de detención, higiene, alimentación -cuidados médicos adicionales exigidos por las leyes internacionales desde Ginebra, desde antes incluso, respecto dicha población civil especialmente vulnerable, madres y bebés- administró dicho personal tales centros?
Porque de no reunirse esas mínimas condiciones de detención nos podríamos encontrar, igualmente, en el terreno de análisis de distintos posibles supuestos del legado de Nuremberg y otros instrumentos internacionales.
¿Carácter sistemático o actuaciones puntuales?

“Malos tratos físicos y psicológicos”, señala el Consejo de Europa, por parte del "personal religioso", ¿en qué concretos centros?, ¿por parte de qué concretas personas?, ¿se trató igualmente de actuaciones puntuales o de actuaciones generalizadas o sistemáticas hacia estas mujeres y sus pequeños?... una u otra respuesta nos llevaría a hablar, en su caso, de muy distintos tipos de responsabilidad.
¿Dónde están los registros de madres y niños presos?

Y además, ¿qué mujeres, qué niños, qué jóvenes, pasaron por dichos centros inexplicablemente provistos de personal religioso-penitenciario por la Iglesia Católica?
Porque otra obligación por parte de la autoridad penitenciaria, sea esta -anómalamente- religiosa o no, es la de llevar un detallado registro de presos, defunciones, puestas en libertad, traslados -y, en su caso a dónde-; más aún de separarse a menores de edad respecto de los restantes miembros de su propia familia... y más aún cuando varios historiadores han denunciado igualmente que tales registros simplemente no existen, y eso, jurídicamente, tampoco es posible; no sin encarar nuevas y adicionales esferas de responsabilidad.
¿Qué conocimiento tenía o debío haber tenido la Conferencia Episcopal Española?

Todo ello, punto por punto, de haberse producido tal y como denuncia el Consejo de Europa, situaría a la Iglesia Católica, de propia mano, en el delicado terreno de las "relaciones de sujección especial", espacio de protección reforzada de los derechos fundamentales de los detenidos... ¿con qué grado de conocimiento de la Conferencia Episcopal se hizo?, ¿con qué diligencia se interesaron dichas autoridades superiores jerarquicas por la supervisión de la adecuada situación de todas esas presas -de los pequeños presos-, en estos centros vigilados por ese, su, personal subordinado en el ejercicio de dichas poco comprensibles funciones en colaboración con Franco?
¿Qué conocimiento tenía o debío haber tenido el mando superior, el Vaticano?

Más aún, ¿con qué grado de conocimiento de las autoridades últimas, las de Roma, superiores jerárquicos máximos en el vértice de la organización y, simultáneamente además -aunque esto ha sido completamente olvidado- autoridades de un Estado, el Vaticano, susceptible por tanto de rendir cuentas ante los distintos intrumentos internacionales de Derechos Humanos?, ¿hasta qué punto "sabían", "debían haber previsto" o "trataron de impedir o sancionar" ese tipo de conductas como reclama el elemental principio de “responsabilidad por el mando” consagrado en los juicios de Nuremberg y que no sólo se aplica a estructuras militares sino a toda estructura jerarquizada como lo es la Iglesia Católica?
¿Qué reparaciones ha habido para estas madres presas?

Y, sobre todo, ¿qué reparaciones morales y materiales han ofrecido, en su caso, a todas esas personas sus ex-carceleros?, ¿qué justicia?, ¿cual es la verdad detrás de todos estos hechos y cuándo podrá tenerla a su alcance cualquier ciudadano, si es que alguna vez somos capaces de mirarla de frente como sociedad salida de un genocidio, el franquista, que aún no somos capaces ni de llamar por su nombre?
Una denuncia que no puede seguir siendo desatendida más tiempo.

La denuncia del Consejo de Europa, organismo de amplio prestigio internacional en materia de derechos humanos en cuyo seno se haya el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, su pieza más visible, resulta de la suficiente gravedad en sus implicaciones humanas, jurídicas e internacionales como para que no pueda seguir siendo desatendida más tiempo; menos aún cuando, junto a todo ello, dicha denuncia nos sitúa en el terreno colindante con actuaciones aún más graves, si ello es posible, cuando -en su punto 72- se definiría precisamente el caso de los niños perdidos del franquismo como el de “hijos de presas cuyos apellidos fueron modificados para permitir su adopción por familias adictas al régimen”.

¿Hubo personal religioso en las cárceles dónde desaparecieron bebés?

¿En qué centros penitenciarios se hallaban, en particular, esas mujeres "presas" cuyos hijos les fueron arrebatados –y que el Consejo de Europa no especifica tampoco si están entre los “numerosos establecimientos penitenciarios" provistos de personal por la Iglesia o en algún otro establecimiento no provisto por dicho personal– ?; Y, de haberse verificado casos de desaparición infantil también entre los primeros, ¿hasta qué punto dicho personal religioso pudo haber tenido conocimiento y responsabilidad, como guardianes de estos, por lo sucedido en su seno?, ¿hasta que punto pudo o debió impedir que se separase a estas madres de sus pequeños?, ¿hasta qué punto pudieron o debieron tener conocimiento sus superiores jerárquicos en España de todo ello?, ¿y los de Roma?
"Investigación oficial" también del Estado Vaticano.

Un año después de las actuaciones del auto de la Audiencia Nacional nos sigue faltando una investigación "oficial, efectiva e independiente" por parte del Estado español, pero también por parte del Estado Vaticano tal y como se deriva de la jurisprudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
"Monjitas-guardianas"

Pero los estremecedores testimonios del horror narrados por algunas supervivientes, los cuerpecitos de niños pequeños muertos de malnutrición y enfermedad, la cruel actuación de algunas "monjitas-guardianas" –qué completamente anómalo dicho termino, y de que forma tan anómala también nos hemos habituado a él sin reparar en sus fundamentales implicaciones jurídicas de fondo– reclaman una respuesta. Y la debería reclamar también el propio Estado Vaticano, activando por propia iniciativa dicha investigación, en consonancia con sus otras actuaciones radicalmente distintas en su compromiso por la defensa de los derechos humanos en otros países.
Un debate incompleto sobre la "educación para la ciudadanía"

Mientras tanto, y al calor también del vigente debate igualmente promovido por la propia Iglesia Católica de España, sobre el derecho de los padres a educar a sus hijos sin la injerencia -al parecer tiránica- del Estado por pretender obligarles a estudiar la asignatura de educación para la ciudadanía, no he podido dejar de sorprenderme, día a día y mientras desarrollaba mi propia investigación jurídica, por el silencio de nuestros obispos sobre todo ello.

El silencio sobre si el derecho de los padres a educar a sus hijos conforme a su propia conciencia se aplicaba, también, a todas estas madres presas, maltratadas y olvidadas: sobre cual fue la concreta actuación de nuestra Iglesia en aquel entonces, cuando según el punto 73 de dicho mismo Balance "varios miles de hijos de obreros fueron también enviados a instituciones del Estado porque el régimen consideraba su familia republicana como "inadecuada" para su formación".

Aunque seguramente el análisis de esto último, de todo ello en realidad, se lo habrán reservado ya los organizadores del acto para la siguiente ocasión de reflexión en la CEU.
Miguel Ángel Rodríguez Arias es profesor de Derecho penal internacional de la UCLM y autor del libro El caso de los niños perdidos del franquismo: crimen contra la humanidad que dio lugar a las actuaciones de la Audiencia Nacional, así como de las primeras investigaciones jurídicas en nuestro país, publicadas en Jueces para la Democracia, calificando los casos de las fosas de Franco como crímenes de lesa humanidad.

martes, 1 de diciembre de 2009

De elecciones y elecciones

Parece mentira que en un mismo día se puedan suceder procesos electorales de carácter tan distinto y... distante. Me estoy refiriendo a las elecciones que este pasado domingo día 29 de noviembre dieron la presidencia de la República Oriental del Uruguay al ex-guerrillero José (o Pepe, como se le conoce) Mujica. Una segunda vuelta cuyo resultado era previsible pero no por ello menos grato. Pero, a la vez, también me refiero a la farsa electoral que tuvo lugar en Honduras. Parece que cada día que pasa se van quitando la careta todos esos "demócratas" internacionales, preocupados por la "salud" de la democracia hondureña. ¡Farsantes! Empezando por el presidente de EEUU, Barack Obama, y continuando por su lacayo costarricense, el ex Premio Nobel (que es tanto como no decir nada) Óscar Arias quien, agotado su primer intento fracasado de negociación, se ha abocado a esta artimañana para legitimar el golpe de una manera más sutil. A estos dos tunantes se han unido, cómo no, los gobiernos de Perú, Panamá y ¿adivinan? Sí, sí, ese adalid de la democracia en América Latina, el gobierno colombiano. Sólo faltó que México se pronunciara junto a estas naciones pero, aunque ganas no le faltan al gobierno de Felipe Calderón (ya sabemos lo bien que se lleva y los favorcitos que le hace a su gran amigo Uribe), toda la tradición mexicana en materia de política exterior podría tambalearse todavía más de lo que lo hizo bajo mandato de Vicente Fox. No es que les importe demasiado, no se crean, pues estos se pasan la política exterior y lo que sea por el forro. Sin embargo, ya saben que México se caracteriza por saber nadar y guardar la ropa en materia internacional (en casa es otro asunto, no hacen falta remilgos para actuar a pierna suelta).

Asistimos a una nueva estrategia de golpismo del siglo XXI. Parece que les entró envidia del socialismo del siglo XXI y han querido crear su contraparte reaccionaria versión renovada. Cambian los tiempos y la maquinaria se perfecciona. ¡Faltaría más! Como leía hoy en un comentario a la columna de Isaac Rosa en Público titulada hoy irónicamente "Fiesta de la democracia en Honduras"-excelente como siempre en la elección de sus temas así como en su desarrollo- esto ya no es "soft power" ni "hart power" sino "smart power". Dejo el enlace al blog del autor del comentario, Miguelo Arencibia, quien cita a Eva Golinger en su reciente artículo sobre el "Smart Power" de EEUU.




El problema en todo este asunto es que se están legitimando los acontecimientos por vía de los hechos consumados. ¿Que qué es? Pues hacer las cosas por las buenas o por las malas (más de lo segundo que de lo primero para el caso hondureño) y hacerse un poco el loco ante las condenas internacionales que puedan llegar. Total, todos sabemos que van a acabar en agua de borrajas si no hay voluntad política DE VERDAD para solucionar el asunto. Y quien tendría que tenerla (léase EEUU) no la tiene así que... No se preocupen, pronto nadie se acordará del golpe de Estado en Honduras, ni del Mel Zelaya, ni siquiera de Micheletti-Goriletti quien, no lo duden, saldrá impune de todo esto. A lo sumo lo veremos sacudirse un poco de caspa de la solapa mientras es evacuado al retiro dorado de todo golpista y sanguinario latinoamericano que se precie: Miami. Que se lo digan si no a Posada Carriles, Carlos Andrés Pérez o al infame Sánchez de Losada.


En fin, no quiero extenderme con las incoherencias y la violación de todo principio democrático que supone el hecho de que unas elecciones celebradas en medio de una dictadura golpista con la finalidad de legitimar un golpe dado meses atrás, en medio de un ambiente de represión política, con el presidente del país exiliado en la Embajada de Brasil, y, sobre todo, con más del 60% de abstención, sean dadas por válidas por cierta comunidad internacional. Es evidente que hay muchos intereses en juego para que ello sea así. Y, por supuesto, no es de extrañar que los perros del capitalismo (los mass-mierda, como dice un amigo) hayan acudido prestos a legitimar el resultado electoral con titulares panegíricos que harían sonrojar a cualquier persona con dos dedos de frente y un mínimo de decencia. Véase, si no, el infame artículo de Francisco Peregil en "El País" titulado Porfirio Lobo, el hombre del cambio. No tiene desperdicio, desde luego. Se lo pueden leer enterito y, hasta el final, no encontraran las altas cifras de abstención de las elecciones. Además de presentar los datos de manera confusa, el corresponsal se dedica también a reducir el impacto de la abstención. Como si tuviera un manual recibido desde el mismísimo Departamento de Estado de EEUU.



Déjenme que finalice estas reflexiones con cierta esperanza. La que representa la victoria de Pepe Mujica en Uruguay. Hoy pude ver la entrevista que Walter Martínez, el gran periodista uruguayo que presenta Dossier en Venezolana de Televisión, le realizó en 2005 y que hasta el día de ayer permaneció inédita. Ahí me topé con un hombre extremadamente humanista lo cual ya tiene mérito teniendo en cuenta que pasó 14 años de su vida (¡¡sí, sí, 14 años, imagínense lo que es eso en sus vidas!!) en una prisión, 7 de los cuales en completo aislamiento, sin poder siquiera leer (algo que hace mucho daño a los rojos, ya saben, porque tienen el mal hábito de informarse e instruirse). A eso hay que sumar torturas, vejaciones -tanto para él como para su compañera de la que ya hablé en otra entrada- y un sinfín de sufrimientos que los que nunca hemos pasado por eso no podemos siquiera imaginar. Una persona que ha intentado ser anulada de ese modo, todavía cree en el ser humano... ¿No les parece maravilloso? Aparte de increíble. Es más, sus palabras de entonces (y suponemos que de ahora también) apelan a mantener la rabia pero no guardar rencor u odio. Se puede discrepar de esta postura pero no se puede negar que es meritoria, habida cuenta del historial de vida de Mujica. En esa misma entrevista, Mujica recomienda a los jóvenes que se encuentren con algún obstáculo en la vida, del tipo que sea, que nunca desistan porque siempre hay un nuevo amanecer... Palabras al nivel de las pronunciadas por el Che o por Salvador Allende en sus últimos momentos de vida. ¿No les parece?


Dejo el enlace a la entrevista para que puedan deleitarse con sus palabras consultando la segunda parte del programa de Walter Martínez aquí.


Y, por último, para la reflexión: un político que llega al poder y que dice que su sueldo será dedicado a obras de caridad, a excepción de un 15% del mismo que lo dedicará a tratar a un familiar enfermo... ¿No es para reconciliarnos con el mundo? Pues lo dicho, aunque las elecciones no sean la panacea de nada, sí son un instrumento que nos puede traer gratas sorpresas o provocarnos grandes disgustos.



Seguiremos al tanto de lo que suceda en Honduras...